La gama de máquinas GUILL está adaptada para poder trabajar con cualquier tipo de film bobinado. No obstante, la sostenibilidad es hoy en día un factor clave en las decisiones de compra que toman una mayoría de consumidores. Por esta razón, en GUILL hemos adaptado y preparado nuestros equipos para poder manipular bobina de papel como material de embalaje, generalmente 90-100 gr/m².

El material de embalaje en papel es fácilmente reciclable y puede ser reciclado, por tanto, tiene un riesgo mínimo de terminar en un vertedero. Aun así, suponiendo que termina desechado en la naturaleza, el embalaje desaparecerá en cuestión de meses, ya que el papel se biodegrada de forma natural sin dejar en el medio ambiente.

Es justo decir también que algunos plásticos son amigables con la naturaleza. La mayoría de los bioplásticos son biodegradables en un corto plazo de tiempo o incluso compostables en algunas condiciones.

La industria no es ajena a este debate, ni tampoco GUILL que participa y evoluciona del mismo adaptándose al poder de la economía circular basada en el principio Reduce, Reutiliza y Recicla.

Independientemente del tipo de film, aportamos nuestra contribución para reducir la huella de carbono.